“La verdad no se negocia con el algoritmo”
AcidReport.ch está en línea. No promete lo que no pueda demostrar. Es una herramienta construida a pulso para verificar mejor y decir solo lo comprobable. Reforcé la seguridad, ordené el archivo y afiné una interfaz que no distrae. El trabajo no termina, cambia de forma, y exige lo de siempre, escribir sin pedir permiso y sostener la verdad frente al ruido.
Para evitar confusiones. El “.ch” del dominio corresponde a Suiza, siglas de Confederación Helvética, no a Chile que es “.cl”.
El cambio es de arquitectura mental. La portada organiza los artículos recientes en un flujo legible, el archivo permite navegar por fechas sin perderse, las categorías y etiquetas orientan sin ruido. El buscador devuelve resultados precisos y no entretiene. Los enlaces antiguos redirigen automáticamente a la nueva casa, memoria garantizada y continuidad sin pasillos infinitos. La elección técnica es austera y orientada al contenido. Mejoras de rendimiento, compresión de imágenes, lectura limpia en móviles, refuerzos de seguridad y copias de respaldo. Analítica mínima para medir lo que importa sin convertir a nadie en mercancía. Menos ornamento, más método. La salida se adelanta por razones obvias. Hubo ataques y saturaciones, días densos y tentación de callar. La respuesta es un sistema más sólido y claro, menos vulnerable a la improvisación. Si algo falla lo corregiré, si algo falta lo incorporaré sin ruido.
Agradezco a quienes empujaron cuando la inercia invitaba al cansancio. A los que leyeron en silencio y enviaron correcciones con paciencia, a los que señalaron errores sin paternalismo, a los que compartieron un artículo en el momento exacto, a quienes escribieron un mensaje corto diciendo que seguir no era en vano. Cada gesto cuenta en una economía moral que no paga dividendos visibles pero sostiene lo que de otro modo se desploma. En un oficio lleno de simulaciones, el apoyo concreto vale más que cualquier discurso sobre la libertad que no resiste dos preguntas.
Agradezco también a mis padres, que me han inspirado siempre y me enseñaron a sostener el trabajo sin atajos, a cuidar la paciencia y a desconfiar de lo fácil; esta casa es también su obra silenciosa. Y agradezco a mi compañera, que me acompañó a lo largo de todo este proceso, en las pruebas que no cargaban y en las noches en que nada parecía encajar, que sostuvo los silencios y el ritmo cuando la fatiga mordía. Sin ese sostén íntimo este sitio no existiría como existe hoy.
Un agradecimiento muy especial para Cathy Ferré. Su invitación a publicar en FAL MAG me devolvió una certeza que creía agrietada. Ese gesto, que pudo parecer menor para quien lo hizo con naturalidad, fue decisivo para empujar esta transición y para no rebajar el estándar en la investigación cuando la fatiga se instala y la duda intenta negociar con el mínimo esfuerzo. Cathy, gracias desde el fondo del corazón, tu confianza tuvo consecuencias reales para el futuro de AcidReport y queda escrita aquí, donde debe quedar lo que importa. Uno avanza cuando alguien abre una puerta sin pedir algo a cambio y recuerda que no todo está supeditado al cálculo. Desde hoy inicio un archivo sistemático con fechas, resúmenes y fuentes para que el método sostenga la memoria. En breve habrá versión en español, francés e inglés con la misma estructura. Se sumarán dos secciones, cultura y medioambiente, para abrir espacio a otras voces sin perder la línea.
Exploren el sitio y señalen ajustes. Si encuentran un enlace roto, un error o una cifra imprecisa, agradeceré el aviso. Prefiero un silencio honesto a una afirmación apresurada y una cifra exacta a una frase brillante que no resiste verificación. Este lugar existe para cruzar fuentes abiertas y exponer lo que otros prefieren en penumbra.
AcidReport.ch es una casa nueva con la misma obsesión, decir con claridad lo que se puede probar. Si resulta útil, léanlo, compártanlo, discútanlo sin ceremonia. Seguiré escribiendo. Ustedes, si quieren, sigan leyendo y compartiendo…
G.S.
