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Síntesis inicial
En 2 minutos: El acuerdo de primera fase anunciado el 9 de octubre de 2025 promete intercambio de rehenes, repliegue militar parcial y ayuda humanitaria. Este texto demuestra que más de sesenta y seis mil palestinos han sido asesinados desde octubre de 2023, que la hambruna está confirmada por el sistema IPC y que una comisión de la ONU concluyó en septiembre que Israel comete genocidio. Explica cómo el acuerdo evita compromisos sobre levantamiento del bloqueo, justicia y responsabilidades políticas. Si solo puedes leer esto, quédate con esto. Sin mecanismos verificables de control y rendición de cuentas, no hay acuerdo sino pausa armada.
Un acuerdo de primera fase fue anunciado el 9 de octubre de 2025. Se vende como el comienzo del fin de la guerra. Habrá intercambio de rehenes y presos, retirada militar hasta una línea definida, alivio humanitario anunciado. Mientras tanto, el hambre sigue arrasando y las ruinas no se mueven. Escribo para medir la distancia entre el anuncio y la vida concreta de la gente.
Primer balance del anuncio
El acuerdo presentado como fase uno promete una pausa en las hostilidades, la liberación de rehenes que siguen en Gaza y un canje progresivo por prisioneros palestinos. Las delegaciones no se miran a la cara, intermediadas por El Cairo, Doha y Ankara. Washington se adjudica el hito y ofrece dinero para reconstrucción. El texto menciona treinta y tres rehenes israelíes en la primera fase y aproximadamente doscientos prisioneros palestinos, sin especificar criterios de selección ni garantías para quienes quedan fuera.
La fase uno contempla el ingreso de trescientos camiones diarios de ayuda humanitaria. Las agencias de la ONU estiman que Gaza necesita al menos mil para revertir la hambruna. El repliegue militar anunciado alcanza únicamente zonas urbanas del norte, dejando sin tocar el corredor Netzarim que divide la franja en dos mitades incomunicadas. Los gobiernos que aplaudieron el anuncio conocen la aritmética. Celebran un acuerdo que garantiza menos de un tercio de la ayuda necesaria y pospone cada decisión estructural.
Dato clave
El acuerdo contempla 300 camiones diarios de ayuda. Las agencias ONU estiman 1000 necesarios para revertir la hambruna. Primera fase incluye 33 rehenes israelíes y ~200 prisioneros palestinos. Repliegue militar limitado a zonas urbanas del norte, sin desmantelar el corredor Netzarim que divide Gaza.
Cronología del desastre
Siete de octubre de 2023, ataque de Hamas seguido de asedio total. Enero de 2024, la Corte Internacional de Justicia ordena medidas provisionales para prevenir genocidio y garantizar ayuda humanitaria. Durante 2024 y 2025, treguas breves y canjes parciales que nunca duraron más de dos semanas. Agosto de 2025, el sistema IPC confirma hambruna en el gobernadorato de Gaza. Septiembre de 2025, una comisión independiente respaldada por la ONU concluye que Israel comete genocidio conforme a cuatro de los cinco actos tipificados. Octubre de 2025, conversaciones indirectas derivan en un acuerdo de fase uno con intercambio y repliegue parcial.
Cada tregua anterior colapsó por violaciones cruzadas y ausencia de mecanismos de verificación independiente. El patrón se repite. Anuncios diplomáticos, implementación parcial, rebrote de hostilidades.
El costo humano verificado
Más de sesenta y seis mil palestinos han sido asesinados desde octubre de 2023 según informes humanitarios consolidados. Decenas de miles resultaron heridos, con hospitales dañados y escasez crónica de insumos. El norte y buena parte de la franja han sido declarados zonas prohibidas durante meses. Las familias han vivido enteras en carpas bajo bombardeos intermitentes, sin seguridad, sin escuela y sin horizonte.
Las cifras no son intercambiables. Existen nombres, barrios, líneas de parentesco rotas. Un acuerdo que no se haga cargo de esa fractura equivale a mutismo oficial. Más del sesenta por ciento de las viviendas están destruidas o inhabitables. La infraestructura productiva desapareció. Los sistemas de salud, educación y saneamiento han sido desmantelados.
“La dominación colonial no es simplemente control territorial, sino la capacidad de definir qué vidas merecen ser vividas y cuáles pueden ser sacrificadas.”
– Edward Said –
Hambre verificada
La hambruna no es un eslogan. El sistema IPC confirmó hambruna en el gobernadorato de Gaza en agosto de 2025 y proyecta expansión hacia Deir al Balah y Jan Yunis. Decenas de miles de niñas y niños se encuentran en desnutrición aguda y miles en forma severa. Durante el último semestre se han documentado muertes por inanición y colas bajo fuego en puntos de distribución.
El acuerdo no menciona infraestructura básica sin la cual no hay vida que proteger. Agua potable, combustible para plantas eléctricas, redes de frío para medicamentos y vacunas, telecomunicaciones para coordinar la ayuda. Todo ha sido saboteado durante dos años. Los hospitales funcionan al veinte por ciento de su capacidad. Las plantas desalinizadoras están paradas por falta de combustible.
Trescientos camiones diarios no alcanzan para revertir el daño acumulado. Sin desbloqueo logístico y sin garantías verificables de acceso, toda promesa es liturgia.
Marco jurídico internacional
Una comisión independiente respaldada por la ONU concluyó en septiembre de 2025 que Israel comete genocidio en Gaza conforme a cuatro de los cinco actos tipificados en la Convención. La Corte Internacional de Justicia había ordenado en enero de 2024 medidas provisionales para prevenir el crimen, asegurar la ayuda y proteger a la población civil. Los gobiernos que aplauden el acuerdo conocen esos mandatos judiciales y los ignoran.
El acuerdo de fase uno no garantiza el cumplimiento de medidas ya ordenadas por la CIJ ni establece mecanismos de rendición de cuentas. La justicia penal internacional camina despacio. Pero la evidencia no. Existen informes sobre ataques sistemáticos a servicios de salud que documentan un patrón dirigido a destruir condiciones de reproducción física y social. También existen crímenes de Hamas. La diferencia radica en que uno ocupa y asedia con superioridad militar abrumadora.
Dato clave
Enero 2024: CIJ ordena medidas provisionales para prevenir genocidio. Septiembre 2025: comisión ONU concluye que Israel cumple 4 de 5 actos tipificados de genocidio. Octubre 2025: el acuerdo no menciona rendición de cuentas, inspección independiente ni sanciones por incumplimiento.
Reconfiguración territorial
El mapa de Gaza se ha ido reescribiendo en silencio. Corredores de seguridad, zonas tapón, áreas de demolición que alcanzan más del setenta por ciento del territorio. El acuerdo no dice cómo se revierten esas amputaciones ni quién gobierna sobre la tierra arrasada. El corredor Netzarim, que atraviesa Gaza de este a oeste cortándola en dos mitades, permanece intacto según los términos públicos del acuerdo. Miles de familias del norte no podrán regresar a sus tierras mientras ese corredor funcione como frontera interna.
Tampoco hay cartografía pública del desminado ni calendario de levantamiento de restricciones. La frontera con Egipto funciona como mercado negro. El acuerdo calla sobre Rafah, sobre los túneles, sobre los mecanismos de control aduanero.
La economía del después
La reconstrucción es un negocio antes de ser una promesa. Los mismos estados que toleraron la destrucción se ofrecen como arquitectos de la reparación. Washington habla de un paquete de quince mil millones de dólares condicionado a gobernanza reformada. Europa calcula oportunidades comerciales mientras exige elecciones supervisadas.
El acuerdo no contempla trabajo remunerado y contratos locales para la población gazatí, ni supervisión independiente. Habla de ayuda humanitaria pero no de recuperación económica. Menciona reconstrucción pero no especifica quién decide prioridades. La fase uno posterga toda conversación sobre autogobierno, soberanía económica y control de recursos.
Mediadores y política exterior
Estados Unidos convierte el anuncio en demostración de poder regional y capital electoral interno. Reino Unido pidió implementación rápida pero evitó mencionar sanciones por incumplimiento. Egipto y Qatar preservan su rol como intermediarios imprescindibles. Turquía se sienta más alto a la mesa tras meses de bloqueo comercial a Israel. Europa calcula entre legalidad y negocios. Francia exige garantías judiciales mientras vende armas. Alemania apoya sin condiciones.
Ninguno ofrece garantías concretas de responsabilidad cuando el acuerdo fracase. El acuerdo puede ser la puerta para otra conversación. Liberación total de rehenes, libertad para presos sin condena, levantamiento del bloqueo, inicio de un proceso de rendición de cuentas. Nada de eso sucederá sin presión social transnacional sostenida.
Conclusión
Mediré consecuencias en plazos verificables. A treinta días, combustible, agua y hospitales abiertos. A sesenta, levantamiento documentado de zonas prohibidas y retorno de población desplazada. A noventa, calendario público de responsabilidades y reparación. Cada plazo incumplido revelará la naturaleza del acuerdo.
El armisticio no es un punto final sino una pausa. Lo que viene depende de la capacidad colectiva de exigir transparencia y convertir la presión internacional en garantías materiales. Las organizaciones humanitarias deben publicar informes diarios sobre obstáculos. Las comunidades gazatíes necesitan plataformas para reportar violaciones sin intermediarios diplomáticos.
La complicidad no está solo en quien dispara, sino en quien celebra sin verificar. Este acuerdo será juzgado por sus resultados concretos, no por sus intenciones declaradas…
G.S.
Fuentes
- Informes de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases · IPC · agosto 2025
- Informe de la Comisión Independiente de Investigación sobre el Territorio Palestino Ocupado · Consejo de Derechos Humanos de la ONU · septiembre 2025
- Órdenes de medidas provisionales en el caso relativo a la aplicación de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio · Corte Internacional de Justicia · enero 2024
- Situación humanitaria en Gaza · Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU · octubre 2025
- Declaración sobre el acuerdo de primera fase · Ministerio de Relaciones Exteriores de Egipto · 9 de octubre 2025
- Análisis de daños a infraestructura sanitaria y educativa · Organización Mundial de la Salud · septiembre 2025
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