Lectura estimada: 13 minutos ·
Síntesis inicial
En 2 minutos. Cristian Montaño, chef de 27 años, murió el 1 de octubre de 2025 en Ibagué tras un altercado en el parque Centenario. Dos narrativas se disputan la verdad. La primera sostiene que fue asesinado por manifestar simpatía con el presidente Gustavo Petro. La segunda, defendida por la Alcaldía, afirma que falleció por paro cardíaco sin signos de violencia externa. El TAC de cráneo no mostró fracturas ni hemorragias. Medicina Legal aún no emite dictamen final. Si solo puedes leer esto, quédate con esto. En Colombia, cuando dos versiones compiten por el sentido de una muerte, ninguna institución puede sustituir la verdad forense.
“La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla”
– Gabriel García Márquez –
Lo que se sabe al cierre
30 de septiembre, tarde. Canchas del parque Centenario. Según testimonios publicados por medios regionales, Cristian Montaño llega al lugar manifestando con alegría que el presidente Gustavo Petro visitaría Ibagué el viernes siguiente. Esta expresión de entusiasmo político disgusta a un hombre identificado como Juan Felipe, quien lo increpa. Hay cruce verbal, empujones. Montaño se dirige a su vehículo. Comienza a presentar complicaciones graves mientras intenta abordarlo. Testigos piden una ambulancia que, según los relatos, no llega a tiempo.
Agentes de la Policía Metropolitana lo trasladan en un vehículo oficial a una clínica de la ciudad. 1 de octubre, 11:00 de la mañana. Montaño ingresa al centro asistencial en paro cardiorrespiratorio. El personal de salud realiza maniobras avanzadas de reanimación y logra estabilizarlo temporalmente. Le practican una tomografía axial computarizada de cráneo que descarta fracturas y hemorragias. El primer parte clínico señala ausencia de traumatismos contundentes. 1 de octubre, 23:30. Tras varios paros cardiorrespiratorios, se registra su deceso. Medicina Legal debe emitir el dictamen final sobre la causa de muerte. Nada más puede declararse como certeza mientras ese informe no se conozca.
DATO CLAVE
“Entre enero y julio de 2025, Colombia registró más de 200 hechos de violencia contra líderes políticos y sociales. El 44,5% de estos incidentes entre enero y abril estuvieron dirigidos contra liderazgos políticos. El Tolima aparece entre los departamentos con mayor concentración de violencia política de cara a las elecciones de 2026”
Misión de Observación Electoral, Colombia
Dos versiones que compiten por el sentido
El hecho desató una tormenta inmediata. Una parte de la conversación pública abrazó la hipótesis de violencia política. La tesis se apoya en testimonios que describen una riña tras una alusión de Montaño a su afinidad con el presidente. El relato es verosímil en un clima donde los discursos de odio se han filtrado hasta lo cotidiano, desde los púlpitos locales hasta la sobremesa de cualquier parque. El presidente Gustavo Petro declaró el 3 de octubre en su cuenta oficial de X que Cristian Montaño fue asesinado por simpatizar con sus ideas y acciones. Afirmó que lo golpeó un individuo con nazismo en su corazón y responsabilizó a sectores que han llenado de odio desde los púlpitos de los gobiernos locales. La verosimilitud no sustituye la evidencia.
Del otro lado, la Alcaldía y la Secretaría de Salud sostienen que no hubo trauma letal, que el cuadro clínico sugiere una causa cardiaca. La secretaria de Salud Municipal, Liliana Ospina, confirmó que en el examen físico no se evidenciaron traumas, lesiones ni laceraciones. Francisco Espín, secretario de Gobierno municipal, ratificó que la persona murió por un paro cardiaco sin afectación física externa. La alcaldesa Johana Aranda expresó sus condolencias y confirmó que será Medicina Legal quien determine las causas del fallecimiento. En derecho y en periodismo, cuando dos hipótesis compiten, gana la que se sostiene en pruebas. Hoy, las pruebas concluyentes no han sido publicadas.
En esta disputa hay algo más que técnica narrativa. Están en juego dos capitales simbólicos que buscan convertir un drama humano en combustible político. Si fue una agresión mortal por odio, se confirma la deriva caníbal de sectores que administran la violencia como política de Estado. Si fue un paro súbito tras una pelea, se desinfla el uso faccioso del dolor ajeno. La ciencia forense debe hablar sin presiones externas ni instrumentalizaciones mediáticas.
DATO CLAVE
“El volumen de mensajes con lenguaje violento dirigidos a figuras públicas creció un 42% durante las últimas ocho semanas de campaña en 2025. La estigmatización del adversario convierte al oponente en enemigo, alimentando entornos hostiles y peligrosos para la participación política”
Centro de Internet y Sociedad, Universidad del Rosario
La escena, la ambulancia que no llegó y la responsabilidad del Estado
La tardanza de la ambulancia, de confirmarse plenamente, no es un detalle secundario. En Colombia, la muerte viaja a menudo en el asiento delantero de un patrullero porque el sistema de emergencias falla, porque la burocracia hace esperar, porque la prioridad se define por geografía y por clase. En Ibagué, como en tantas ciudades, esa demora se paga con vidas. No necesito certezas totales para afirmar un mínimo cívico. Un sistema que responde tarde en los minutos de oro es un sistema que condena sin sentencia.
La escena registrada por cámaras y por celulares, con policías levantando a un hombre descompensado y cargándolo en un vehículo oficial, revela una normalidad torpe. Los uniformados hicieron lo que pudieron dentro de su margen de acción limitado. Lo indigno es que ese margen exista como rutina administrativa. La discusión sobre intolerancia política no cancela la discusión sobre infraestructura sanitaria. Ambas importan. Ambas matan cuando fallan. Ambas exigen rendición de cuentas institucional.
Violencia política o muerte súbita
Hecho uno. Hubo una riña verbal y física. Hecho dos. El parte preliminar no halló trauma letal en cabeza ni cuerpo. Hecho tres. La muerte ocurrió aproximadamente 24 horas después del episodio. Hecho cuatro. El clima de polarización en Ibagué es real y documentado. Ninguno de estos hechos permite, por sí mismo, concluir homicidio ni absolver al agresor de responsabilidad penal o moral. Aun si el deceso se debió a un evento cardiaco, una agresión puede ser el disparador fisiológico.
La tentación de resolver la historia con un tuit institucional o con un boletín partidario es grande. Resisto esa tentación como ejercicio de probidad periodística. La muerte de un joven chef no puede ser el insumo que mida la capacidad retórica de ningún poder en disputa. No me interesan las demostraciones de fuerza simbólica ni las victorias narrativas de campaña. Me interesa que la verdad judicial se imponga con transparencia, que el sistema de emergencias rinda cuentas públicas, que el agresor responda por lo que haya hecho conforme a derecho y que el dolor de una familia no se utilice como peaje de campaña electoral.
DATO CLAVE
“En el primer semestre de 2025, Colombia reportó 34 denuncias de homicidios de líderes sociales y defensores de derechos humanos. Desde la firma del Acuerdo de Paz en 2016, suman 474 excombatientes asesinados hasta junio de 2025. La violencia política en Colombia no es un fenómeno aislado sino un patrón estructural”
Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios, Naciones Unidas
La educación como antídoto del odio
La misma semana en que Cristian Montaño cae en el parque Centenario, Tomás Pinzón, un estudiante de secundaria prepara un discurso sobre educación en un colegio público de Cogua, Cundinamarca. Escribe que su institución le cambió la vida, que la emoción debería ser el motor del conocimiento, que hay que desmontar el molde colonial que nos programa para ser piñones de un sistema esclavista. Habla de saberes ancestrales, de dialectos originarios, de tradición oral sin Alzheimer impuesto por narrativas dominantes. Ese adolescente vive en el mismo país donde un chef muere tras expresar alegría política. Ese contraste dice más del país que cien vertederos de opinión algorítmica.
Si Colombia puede producir simultáneamente un linchamiento por simpatías petristas en Ibagué y un discurso estudiantil sobre descolonización del saber en Cogua, entonces hay una batalla en curso por el alma de este país. La educación pública, con sus rectores, docentes, personal de apoyo y cocinas, es la primera línea de defensa contra la fábrica del odio institucional. No romantizo un sistema que necesita reformas profundas en financiación, infraestructura y enfoque curricular. Constato que ahí, y no en los púlpitos que administran la furia como mercancía política, se juega una parte de nuestra salida civilizatoria. Montaño murió donde debía estar protegido por la convivencia. Ese estudiante escribe donde debería estar blindado por el pensamiento crítico. Ambos escenarios dependen de instituciones que funcionen.
Conclusión
Exijo tres cosas como periodista y como ciudadano. Uno. Que Medicina Legal entregue con celeridad y sin interferencias políticas su dictamen sobre la causa de muerte de Cristian Montaño. Dos. Que la Fiscalía investigue la conducta del agresor y determine responsabilidades penales conforme a derecho. Tres. Que la Secretaría de Salud de Ibagué rinda cuentas sobre los tiempos de respuesta del sistema de emergencias y que se revelen los protocolos aplicados en la zona del parque Centenario. No pido milagros institucionales. Pido instituciones funcionando con mínimos de eficacia y transparencia.
Pido además un compromiso público de todos los actores políticos para no explotar el dolor de una familia como mercancía electoral. Nadie merece que la muerte de su hijo se convierta en capital simbólico de campaña. Y pido a la prensa regional un estándar simple pero no negociable. Titular no es sentenciar. Informar no es adjetivar. Cuando todo arde en redes sociales, el periodismo debe bajar el volumen y elevar la prueba documental.
La justicia debe hablar con la voz de Medicina Legal y con la evidencia científica. Si hubo homicidio, que haya imputación y proceso transparente. Si hubo muerte súbita tras una riña, que el país entienda que la violencia cotidiana no necesita un mártir para ser intolerable como práctica social. El Estado local debe responder por su sistema de emergencias y por la coordinación sanitaria en zonas de alta afluencia pública. La ciudad debe cuidar su conversación democrática. No hay construcción política posible cuando el adversario se vuelve enemigo y el vecino, amenaza existencial…
G.S.
Fuentes
- Atención Cristian Montaño habría sido atacado por ser petrista en Ibagué, Ecos del Combeima, 3 octubre 2025
- Investigan misteriosa muerte de reconocido chef tras brutal altercado en el Centenario, Ecos del Combeima, 3 octubre 2025
- Gustavo Petro se refirió al homicidio del chef Cristian Montaño en Ibagué, Infobae Colombia, 3 octubre 2025
- La Alcaldía de Ibagué desmiente versión de Petro sobre el chef Cristian Montaño, Infobae Colombia, 3 octubre 2025
- Las dos hipótesis sobre el fallecimiento de Cristian Montaño en Ibagué, Noticias Caracol, 3 octubre 2025
- Chef murió en Ibagué por paro cardiaco y no por golpes en la cabeza, El Olfato, 3 octubre 2025
- Secretaría de Salud de Ibagué desmiente homicidio del joven chef, Alerta Tolima, 3 octubre 2025
- Alcaldía señala que el chef Cristian Montaño murió de un ataque cardiaco, El Cronista, 3 octubre 2025
- Misterio rodea la muerte de un chef en el parque Centenario de Ibagué, El Nuevo Día, 2 octubre 2025
- Gobernadora del Tolima rechaza hechos que habrían desencadenado la muerte del chef Cristian Montaño en Ibagué, Tolima Estéreo, 3 octubre 2025
- Según las autoridades, el cuerpo de Cristian no registró traumas contundentes, La Voz del Pueblo, 3 octubre 2025
- Pronunciamiento del presidente en X sobre el caso Cristian Montaño, 3 octubre 2025
- Petro condena asesinato de joven chef en Ibagué, La Otra Verdad, 3 octubre 2025
- Frenar la violencia política y la polarización en Colombia, Senado de la República de Colombia, 12 agosto 2025
- Colombia: la violencia política y el terrorismo amenazan la democracia, Parlamento Europeo, septiembre 2025
- En Colombia es más urgente que nunca sacar la violencia de la política, Noticias ONU, 20 julio 2025
- Graves riesgos para la participación democrática: MOE alerta sobre la violencia contra liderazgos y la radicalización política, Misión de Observación Electoral, 9 junio 2025
- Violencia política en Colombia: Magnicidios y desafíos para la democracia, Observatorio Político de las Américas, 12 junio 2025


Deja un comentario